La Liga Mexicana fuma la pipa de la paz con la Liga del Pacífico. Apenas concluyó su temporada 2019 y la LMB mandó el primer mensaje de lo que viene en sus proyectos, y parece que una de sus prioridades es seguir probando pero con la prioridad de acabar con las diferencias con la LMP.
Gabriel Medina, presidente interino de la Liga Mexicana, estuvo presente en los juegos de la Selección Mexicana en Puebla, y ahí informó en plática con Séptima Entrada, que la temporada 2020 comenzará el 6 de abril y terminará, ya contando un posible Juego 7 de la Serie del Rey, a principios de septiembre, con lo que no se encimará al inicio del trabajo de los equipos del Pacífico.
Además, dio a conocer que el próximo calendario tendrá 102 juegos, 18 menos de los que tuvo este año, al responder a una necesidad económica y estratégica de los equipos.
“Estamos recorriendo el calendario, creo que esto da una mayor oportunidad a que, tanto la pelota de verano como la de invierno quepamos perfectamente bien en el calendario”, apuntó Medina Espinosa en esa entrevista.
Después de vivir por años y por decisión propia, bajo la sombra de las decisiones de unos cuantos presidentes y dueños, la LMB comenzó etapas de cambio para adaptarse a los nuevos tiempos. La llegada de nuevos dueños, que ven en el beisbol una oportunidad de negocio, hizo que se cambiara el chip y que se empezara a trabajar en convertir al beisbol en un espectáculo atractivo... y para lograrlo, han tenido que realizar diversas pruebas.
Llegó la apuesta a nuevas tecnologías (redes sociales, páginas de streaming), el cambiar la experiencia en el estadio (empezando por tener mejores estadios), y también, se metió la mano en temas que tienen que ver directamente con el desarrollo del juego, como el contar con dos temporadas con dos Series del Rey el mismo año, el cambiar la pelota y el recorrer el calendario hasta finales de septiembre, así como la polémica decisión de solo sancionar económicamente a los jugadores que den positivo en los exámenes antidoping.
Por lo pronto, espero más cambios en la LMB, ya que se sabrá qué se hará con la pelota y se va a determinar quién será el nuevo presidente (más todas aquellas que no están por definirse), pero todos ellos apuntan al tema de ya no meterse a una pelea innecesaria con la Liga del Pacífico.
¿Qué más vendrá? Ya veremos...
