Aparentemente después de ser dominados de forma rotunda por Justin Verlander y Gerrit Cole, los Astros tendrían el camino libre con Zack Greinke para llegar a la Serie de Campeonato de la Liga Americana. Sin embargo, los Rays fueron quienes menos perdieron las esperanzas en sí mismos; saltaron al terreno del Tropicana Field con el panorama en contra para salir con banderas desplegadas nueve entradas más tarde tras derrotar 10-3 a los Astros de Houston, un juego de cuatro home runs que le evita a Tampa Bay ser barrido en el compromiso.
Go long, @KKiermaier39!#StayHungry pic.twitter.com/4gcfMd2COq
— Tampa Bay Rays (@RaysBaseball) October 7, 2019
El escenario lució complicado desde el inicio pues José Altuve conectó un home run solitario en la misma primera entrada. Fue entonces que los maderos despertaron. En el segundo inning y con dos corredores a bordo, Kevin Kiermaier pegó un panorámico cuadrangular por el jardín central para anotar tres carreras, y un capítulo más tarde, Ji-Man Choi hizo lo propio sin gente en circulación para ampliar el score a 4-1.
La ofensiva siguió incontenible ante Zack Greinke en la cuarta, pues Brandon Lowe abrió la tanda con el tercer home run de la tarde, una pelota que se fue por el callejón izquierdo central. Dos outs más tarde, el manager A.J. Hinch consideró suficiente lo visto de su abridor, pero el relevo tampoco respondió lo suficiente al recibir tres carreras más.
Así como los Astros recortaron distancia en la sexta entrada anotando dos veces más con un sencillo de Yuli Gurriel, quien encontró corredores en segunda y tercera, los Rays volvieron a tomar distancia con el cuarto y último vuelacercas de la tarde, un solitario batazo de Willy Adames, mientras un error en el fildeo de Alex Bregman se convirtió en carrera tras un elevado de sacrificio de Travis d’Arnaud.
Los cuatro cuadrangulares pegados por los Rays empataron el récord de más home runs pegados por la franquicia en un juego de playoffs. La última vez que Tampa Bay había pegado la misma cantidad de vuelacercas fue en el Juego 3 de la Serie de Campeonato de 2008 ante los Red Sox y durante el Juego de Comodín del miércoles anterior ante los Athletics, aunque esta es la primera vez que lo hacen en Tropicana Field.
Zack Greinke se acreditó la derrota pues apenas completó 3.2 entradas de cinco hits y seis carreras. En la conferencia de prensa un día antes del juego, Greinke se presentó para decir únicamente 67 palabras, cifra que terminó siendo mayor a los 61 pitcheos hechos este martes.
In an elimination game, the Rays' ace delivered ... again. pic.twitter.com/zKVYo2Yl7s
— MLB (@MLB) October 7, 2019
Por su parte, aunque poco mencionado, Charlie Morton contuvo a la ofensiva de uno de los equipos favoritos a llegar a la Serie Mundial. En 5.0 entradas, Morton sólo recibió tres hits, una carrera producto del home run de Altuve, en la cuenta perdió a dos bateadores y ponchó a nueve.
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