Padres da el primer golpe contra Dodgers y llegan a 8 triunfos en fila

La carrera por la División Oeste de la Liga Nacional está viva. En la serie que podría definir el rumbo de la temporada para ambos equipos, los San Diego Padres aprovechó la “fatídica séptima entrada” para conseguir su octava victoria en fila al vencer por 7-2 a Los Angeles Dodgers en el primer juego de una serie de tres juegos.

Ahora, la diferencia entre ambos equipos en el standing por el primer lugar sólo se reduce a 1.5 juegos.

El zurdo tres veces ganador del Premio Cy Young, Clayton Kershaw, se enganchó en un tremendo duelo de pitcheo hasta la séptima entrada con el diestro revelación en la rotación de los Padres, Dinelson Lamet. “El Flaco” sacó la mejor parte con 7.0 entradas de una carrera.

Trent Grisham empató el juego a una carrera en la sexta entrada con un panorámico home run por el jardín derecho que superó fácilmente la barda. Cuando el jardinero de los Padres vio la profundidad del batazo, volteó a la caseta de su equipo y completó un bat flip que molestó a la caseta de los Dodgers, quienes intercambiaron palabras con Grisham cuando corría el tramo de tercera base a home.

Una entrada más tarde, después de que Kershaw dejó corredores en herencia con Pedro Báez haciéndose cargo del relevo, el cubano Jorge Oña puso en ventaja a los Padres con un doble. Max Muncy cometió dos errores fundamentales; el más claro, uno en el que se quedó la pelota en la primera base esperando a ver si el corredor Jurickson Profar despegaba desde tercera. Al final, el jardinero de los Padres llegó antes que el tiro a home y se deslizó de costado para ampliar la ventaja de San Diego.

Con el triunfo sobre Dodgers, los Padres llegan a 8 victorias consecutivas, la primera vez que el equipo lo consigue desde el 19-27 de agosto de 2012. Durante esta temporada, San Diego ya había conseguido una racha de 7 juegos ganados del 17 al 23 de agosto cuando barrieron en las series ante Texas Rangers y Houston Astros.

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