La investigación más importante para la oficina del comisionado de las Grandes Ligas comienza a tomar pasos grandes rumbo a un desenlace. De acuerdo con fuentes cercanas a la investigación, miembros de la organización de los Astros de Houston aceptaron ante Major League Baseball que el equipo robó señas durante la temporada 2017.
De acuerdo con las entrevistas hechas durante la investigación, dichos testigos afirmaron que el equipo tenía acceso a una transmisión en vivo con la toma del jardín central, situación que ayudaría al robo de señas en la temporada 2017. Sin embargo, negaron que se haya instalado una cámara especial con ese fin.
La pantalla que reproducía la transmisión fue colocada más cerca de la caseta porque su sala de video estaba demasiado lejos. De acuerdo con los informes, los Astros creían que estaban “en línea con los estándares de la industria” pues sintieron que otros equipos también usaban tecnología para robar señas, aún así, la práctica es ilegal.
Según los datos obtenidos, la pregunta para la oficina del comisionado ya no es si los Astros robaron o no las señas, ahora lo que tratan de determinar es exactamente cómo y en qué medida lo hicieron.
El comisionado Rob Manfred afirmó que podría haber castigos nunca antes vistos, los cuales estarían dirigidos al gerente general del equipo, Jeff Luhnow, así como para el manager, AJ Hinch.
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