El nerviosismo estuvo presente en todo momento, y es que, la mayor parte del juego fue dominada por los porteños por apenas una carrera. Una joya del refuerzo Juan Pablo Oramas, un home run de Ricky Álvarez y un extrabase más que oportuno de Ramón Ríos guiaron la primera victoria de los Venados de Mazatlán por 3-2 ante los Yaquis de Ciudad Obregón en la serie semifinal de la Liga Mexicana del Pacífico, triunfo que los mete en la pelea por llegar a la Serie Final.
Juan Pablo Oramas silencia los bats de @yaquis_oficial y los @venados_mzt se acercan 2 a 1 en las #SemifinalesLMP ???????? pic.twitter.com/9xjrA3Al3o
— LMP (@LMPbeisbol) January 16, 2020
Un home run solitario del “Wolverine” en la segunda entrada puso a los Venados en la pizarra, un batazo que les permitió tomar la ventaja por la mínima, diferencia que Oramas se encargó de llevar hasta la séptima entrada cuando, con dos outs y la casa llena, la “Pulpa” Ríos pegó un doble productor por la esquina del izquierdo para empujar la segunda y tercer carrera del juego para los mazatlecos, una ventaja que se vio amenazada en el octavo inning.
Juan Pablo Oramas, refuerzo tomado para estas semifinales desde Naranjeros de Hermosillo, orquestó una joya de 7.1 entradas, recibió tres hits durante los primeros dos innings para después ponerse en modo intratable retirando en orden a los siguientes 13 bateadores. Al final Oramas recibió las dos carreras de los Yaquis por un home run del receptor Ricardo Valenzuela, el primer bombazo que recibió el zurdo en postemporada desde la 2016-17.
Antes de recibir el cuadrangular, la ofensiva de la tribu abrió la entrada con un sencillo, el mánager J.J. Pacho fue a la loma por Oramas, sin embargo, le dio la confianza para seguir, pero Valenzuela se encargó de sacarlo del juego con el batazo de cuatro esquinas. Con poco margen de error, Pacho no quiso arriesgar y se fue con su cerrador Ryan Newell, quien consiguió los dos outs restantes de la octava, y en la novena, consiguió cerrar la puerta con dos ponches para darle el triunfo al equipo porteño.
Séptima Entrada