Por si alguien hubiera considerado poco lo realizado por Juan Pablo Oramas una noche antes, la nueva sangre del equipo porteño repitió la dosis. Una joya del novato lanzador Édgar Torres, así como un rally definitivo en la sexta entrada, guiaron la segunda blanqueada consecutiva de los Venados de Mazatlán sobre los Tomateros de Culiacán en la Final de la Liga Mexicana del Pacífico, esta vez por 3-0, para empatar a dos triunfos el compromiso por el título en el invierno mexicano.
Tomateros abrió el juego encontrando apenas un par de lanzamientos en zona buena del juvenil Torres para embasar a dos corredores, sin embargo, serían los únicos dos corredores que llegarían a las bases de los primeros 20 bateadores que enfrentó. Por si fuera poco, 14 de esos 20 rivales se fueron en fila.
Torres aún abrió la sexta enfrentando a dos bateadores más, y a pesar de tener apenas 66 pitcheos, tuvo que abandonar el juego por una ampolla en la mano. En total, el zurdo entregó una salida de calidad de 6.1 entradas intactas de apenas tres hits y tres ponches.
Édgar Torres: el revólver poblano ???????? #FinalLMP @venados_mzt pic.twitter.com/YPHtFEG9bR
— LMP (@LMPbeisbol) January 27, 2020
Culiacán dio una férrea pelea en el pitcheo con el ligamayorista Manny Bañuelos quien apenas dejó que tres corredores llegaran a los senderos durante las primeras cinco entradas. En la sexta fue otro completamente, ya que abrió dando una base por bolas, un wild pitch y recibiendo un sencillo del primera base Carlos Muñoz para anotar la primera carrera del juego.
Ante un nuevo lanzador, Venados embasó un corredor más permitiéndo que Muñoz avanzara a segunda y dejando la mesa puesta para que Issmael Salas respondiera con el sencillo productor de la segunda carrera del juego. El bullpen, que esta vez no correspondió a las expectativas, recibió la tercera y última carrera del juego con el segundo wild pitch de la noche.
Así, los Venados confirman su categoría de un equipo que viene de atrás, ya que en esta postemporada abriendo las tres series, en los primeros dos encuentros, tienen marca de 1-5, pero en los juegos restantes, del Juego 3 en adelante, tienen 9-2.
Además, el empate de la serie asegura que la serie regresará a Culiacán para un Juego 6; antes, ambos tendrán que dejar todo en el terreno si quieren ganar el Juego 5 y viajar de regreso a la capital de Sinaloa con la ventaja 3-2 en el compromiso, a un sólo triunfo de alzar el título y representar a México en la próxima Serie del Caribe.
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