Apenas está cumpliendo dos meses de existencia y el Estadio Alfredo Harp Helú ya tiene su primer récord de la Liga Mexicana: el de mayor diferencia en el marcador final.
Los Diablos Rojos del México simplemente hicieron historia al pasarle por encima 29-0 a los Bravos de León, con lo que rompieron la marca que pertenecía a los Sultanes de Monterrey, quienes en 2012 habían vencido 23-0 a los Rieleros de Aguascalientes.
La artillería escarlata destrozo los brazos de los Bravos sumando 27 imparables, 11 de ellos extrabases, con cuatro cuadrangulares. Las anotaciones cayeron en seis entradas: cuatro en la segunda, cinco en la tercera, tres en la quinta, seis en la sexta, cuatro en la séptima y siete en la octava.
Los pingos, en el 2011, también anotaron 29 carreras, fue frente a Unión Laguna, mientras que es la cantidad más alta para ellos desde que en 2013 timbraron 27 veces frente a los Saraperos de Saltillo.
Todos los bateadores de los colorados dieron al menos un hit, destacando Iván Terrazas, quien se fue de 6-5, con cinco carreras y cinco producidas, Juan Carlos Gamboa, quien se fue de 5-5, con cinco anotadas, misma cantidad de anotaciones que logró Emmanuel Ávila. Séptima Entrada.
