Un desafortunado hecho fue lo que sucedió la noche de este martes durante el segundo juego de la serie entre Tigres de Quintana Roo y Bravos de León en La Fortaleza, mismo que terminó con victoria para los visitantes por pizarra de 9-7 en extrainnings.
Corría la parte baja de la fatídica séptima entrada cuando la defensiva de los felinos atrapó en un tira-tira entre tercera y home a Jairo Pérez, quien se vio envuelto en un conato de bronca con el pitcher Wendell Floranus luego de la jugada un tanto accidentada.
Al ver la reacción de los dos jugadores tras haberse marcado el tercer out del episodio, las bancas de ambos equipos se vaciaron, dando paso a una riña que traspasó el terreno de juego con la intervención de los aficionados.
SE CALIENTAN ???????? LOS ÁNIMOS EN EL CAMPO DE JUEGO???????? PORQUE JAIRO PERÉZ EMPATA EL PARTIDO???????????? pic.twitter.com/PJDIZva9wc
— Internetv Deportes (@AYMSports) June 1, 2022
Mientras las discusiones seguían dentro del diamante, la afición que se dió cita en el parque de pelota comenzó a arrojar cerveza, además de realizar señas obscenas y emitir insultos hacia los peloteros.
Como era de esperarse, algunos elementos de los Tigres llegaron a intercambiar palabras con el público, al mismo tiempo que el sonido local y los umpires intentaban calmar el asunto.
Al final las acciones no pasaron a mayores y el encuentro pudo continuar su curso, extendiéndose hasta el octavo episodio en un compromiso que originalmente estaba pactado a siete entradas.
