Carlos Figueroa ya está en Oaxaca para incorporarse al trabajo de pretemporada que realizan los Diablos Rojos del México en la Academia Alfredo Harp Helú, después de que le fue autorizado reportar más tarde por la carga física que tenía tras jugar la Final de la Liga Mexicana del Pacífico y la Serie del Caribe.
Figueroa viene a jugar su novena temporada con el México, en las ocho anteriores ha bateado de por vida para .321 de porcentaje, tiene 642 hits, con 75 dobles, 15 triples y 419 carreras anotadas, en la primera temporada del 2018 fue el campeón de bases robadas en la LMB con 28 estafas.
"Portar los colores del México lo es todo, esta organización me dio la oportunidad de empezar desde abajo y de ser alguien en la pelota. Sin dudarlo daría la vida por los Diablos Rojos del México”, dijo el veloz pelotero.
A pesar de contar solamente con 26 años, Figueroa es uno de los pilares ofensivos y defensivos en la novena dirigida por Víctor Bojórquez, fungiendo básicamente como primer bat y jardinero central, pero además, gusta de estar cerca de los jóvenes que están empezando en el profesionalismo.
“Trato de ayudar como me ayudaron a mí a salir adelante, siempre es bueno contarles de las experiencias buenas o malas para que no tengan que pasar por lo mismo, aconsejarlos en detalles que a mí me pasaron y no cometan los mismos errores”.