El dirigente venezolano Wilfredo Romero fue el protagonista de un polémico incidente en la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente en el que agredió a un umpire mientras alegaba la marcación de una jugada en el juego de los Cangrejeros de Santurce ante Leones de Ponce el pasado sábado, razón por la cual fue suspendido siete juegos en la liga de Puerto Rico.
Durante el séptimo episodio, Romero salió a alegar que un adversario salió adelantado en un pisa y corre de primera a segunda base. Los árbitros marcaron una correcta ejecución en el corrido de bases, motivo que molestó a Romero.
Iván Mercado, el umpire de segunda base, corrió para explicarle a Wilfredo que la apelación era con él pues su compañero de primera base había salido al jardín derecho con el batazo de Francisco del Valle, bateador de Ponce. Romero se irritó rápidamente, comenzó a gritar y se quitó la gorra, provocando su expulsión del juego.
Johnel Rivera, el árbitro de primera base, intentó colocarse entre el manager y Mercado cuando Romero lo empujó.
Después de una breve pero acalorada discusión, Romero se retiró del terreno de juego.
“En ninguna liga sea profesional o no se puede permitir ningún tipo de contacto físico con un árbitro ya que ellos en el terreno representan la autoridad máxima de la liga”, dijo Carlos Berroa, director de torneo de la LBPRC, a través de un comunicado.
La LBPRC le impuso a Wilfredo Romero una suspensión por siete juegos y una multa de mil dólares por el incidente.
Los Cangrejeros de Santurce marchan líderes en la tabla de posiciones con marca de 20-10, apenas medio juego arriba de los Gigantes de Carolina cuando la temporada regular está entrando en la recta final con sus últimos nueve partidos antes de la postemporada.
Wilfredo Romero está dirigiendo a los Cangrejeros, el equipo más popular en el beisbol boricua, un año después de haber manejado a los Tigres de Aragua en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional.